Crisis en Cambiemos por Maradona
Un sector de funcionarios le quiere dar la bienvenida y otro grupo se resiste, dada la fuerte identificación del astro con el kirchnerismo.
El intendente Julio Garro se inclina por tener ese gesto, pero uno de sus principales colaboradores es el máximo detractor.
La llegada de Diego Maradona a Gimnasia tiene un impacto tan grande que llega al ámbito político local, en pleno proceso electoral debido a la fuerte identificación que el mejor jugador del mundo tiene con el kirchnerismo. Uno de los ámbitos de discusión es el Gabinete municipal, donde un grupo de funcionarios ya puso manos a la obra para entregarle la llave de la ciudad y otro lo rechaza terminantemente.
La grieta surgió en el mismo momento en que Maradona comenzaba a sonar como DT del Lobo y creció en los últimos. Hay un interlocutor directo: se trata de Luciano Strassera, el director general de Gestión y Políticas Culturales, quien fuera novio de Giannina, la hija del Diez.
Según las versiones que circulan por estas horas en la Municipalidad, otro que fogonea la idea de darle la bienvenida a Maradona es el secretario de Cultura Gustavo Silva. Conocido es que en el oficialismo, como en cualquier fuerza política, hay caracterizados hinchas de Gimnasia. Uno de ellos es el secretario de Espacios Públicos, Marcelo Leguizamón; el otro es el concejal y exsecretario general, Javier Mor Roig; quienes en distintas épocas fueron dirigentes de la entidad tripera. Ninguno se ha manifestado explícitamente sobre lo que piensan.