Roggio se arrepintió y reconoció que pagó coimas
El empresario Aldo Roggio se arrepintió ante el juez federal Claudio Bonadio y reconoció que pagó coimas al gobierno kirchnerista para mantener la concesión del subte que tiene desde 1994 con Metrovías.
Fuentes con acceso a la declaración del empresario, Roggio reconoció que pagó un porcentaje del 5% de sus dividendos al secretario de Transporte hasta 2011, cuando se traspasó el subte a la Ciudad. Hasta 2009, el secretario de Transporte fue Ricardo Jaime, que está preso. Pero hasta 2012 el secretario fue Schiavi, que está en libertad. Curiosamente Roggio se refirió a Jaime en su declaración pero no mencionó a Schiavi.
De este modo Roggio abrió un nuevo capítulo en el caso de las coimas que investiga Bonadio, puesto que los cuadernos de Oscar Centeno, ex chofer de Roberto Baratta, involucraban al área de Energía y no de Transporte. Bonadio buscaba justamente con Roggio abrir el capítulo Transporte.
"Se determinó un porcentaje del 5 % de los pagos recibidos, que se pagaba en dinero en efectivo, periódicamente y en la persona del Secretario de Transporte", declaró Roggio y agregó que la exigencia se afrontó siempre con "el margen de rentabilidad de la empresa luego de pagar todos los gastos relacionados con la operación segura de los servicios. Los subsidios nunca implicaron una mejora contractual ni de ingresos.
El empresario Aldo Roggio se arrepintió ante el juez federal Claudio Bonadio y reconoció que pagó coimas al gobierno kirchnerista para mantener la concesión del subte que tiene desde 1994 con Metrovías.
Como aseguraron a LPO fuentes con acceso a la declaración del empresario, Roggio reconoció que pagó un porcentaje del 5% de sus dividendos al secretario de Transporte hasta 2011, cuando se traspasó el subte a la Ciudad. Hasta 2009, el secretario de Transporte fue Ricardo Jaime, que está preso. Pero hasta 2012 el secretario fue Schiavi, que está en libertad. Curiosamente Roggio se refirió a Jaime en su declaración pero no mencionó a Schiavi.
De este modo Roggio abrió un nuevo capítulo en el caso de las coimas que investiga Bonadio, puesto que los cuadernos de Oscar Centeno, ex chofer de Roberto Baratta, involucraban al área de Energía y no de Transporte. Bonadio buscaba justamente con Roggio abrir el capítulo Transporte.
"Se determinó un porcentaje del 5 % de los pagos recibidos, que se pagaba en dinero en efectivo, periódicamente y en la persona del Secretario de Transporte", declaró Roggio y agregó que la exigencia se afrontó siempre con "el margen de rentabilidad de la empresa luego de pagar todos los gastos relacionados con la operación segura de los servicios. Los subsidios nunca implicaron una mejora contractual ni de ingresos.